Como motorista, debes ser consciente de los riesgos que vienen de todas direcciones. Un conductor distraído con el teléfono podría chocar por detrás con tu moto en un semáforo en rojo al no ver que el tráfico se ha detenido. Un conductor con exceso de velocidad podría saltarse un semáforo en rojo y golpear el lateral de tu moto al pasar por un cruce. Sin embargo, en la mayoría de los accidentes de moto en los que se ven implicados dos vehículos, la moto también es golpeada en la parte delantera. La National Highway Traffic Safety Administration (Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras) afirmó que estos choques frontales representaban un 76% del total en un estudio. Está claro que éste es, en muchos sentidos, el mayor riesgo.

¿Cómo ocurren estos accidentes?

Estos accidentes pueden producirse de varias maneras. Un conductor puede invadir tu carril, por ejemplo, por no estar atento a la carretera. Puede que ni siquiera vea tu moto hasta el último segundo. Esto ocurre a menudo en los accidentes en los que se envía un mensaje de texto y se conduce. Una de las principales formas en que se produce un accidente frontal es cuando un conductor gira a la izquierda delante de su motocicleta. Puede que no vean la moto en absoluto o que piensen erróneamente que tienen espacio para girar cuando no es así. En cualquier caso, la parte delantera de tu moto golpea el lateral de ese coche o camión al girar. No es un choque frontal para ellos, pero es uno de los choques más violentos que puede sufrir un motorista. Además, ocurre tan rápido que es prácticamente imposible de evitar.

¿Qué puede hacer usted?

La ley de Nueva York es interesante en el sentido de que las leyes de No Culpabilidad se aplican a los vehículos de motor, pero las motocicletas están exentas de ello. La ley señala deliberadamente que las motos no entran en la misma categoría y, por tanto, no se rigen por las mismas normas. Esto puede cambiar la forma de solicitar una indemnización si resultas herido en el accidente. Por ello, si nunca antes has sufrido un accidente grave, es absolutamente fundamental que sepas qué opciones tienes. Los motoristas tienen muchas más probabilidades de sufrir lesiones graves que los que van en vehículos de motor tradicionales, y es necesario que entiendas qué pasos puedes dar para conseguir lo que te mereces.